Tres aspectos clave para conocer los seguros éticos: mutualismo, equidad y transparencia

La mayoría de las personas usuarias no suele ser consciente de que las compañías de seguros se encuentran entre los principales inversores en los mercados financieros. Sin embargo, se trata de un sector en el que las estrategias de inversión son importantes, dados los significativos importes a gestionar. En 2023, los ingresos por primas de las aseguradoras se situaron en 76.463 millones de euros. Una cantidad significativa que se invierte para obtener un beneficio.

Al igual que ocurre con la banca, en el sector asegurador la inversión es la principal fuente de beneficios, pero también debe permitir establecer vínculos sociales y comunitarios. El desconocimiento del funcionamiento de este sector ha alejado, en cierta medida, preguntas  sobre qué uso hace del dinero el sistema asegurador. ¿Existen compañías de seguros que tienen una política de inversión ética? ¿Hay compañías de seguros transparentes respecto a sus inversiones? ¿Es posible la responsabilidad social dentro del sector asegurador, recuperando los principios del mutualismo?

¿Es posible introducir en el mercado asegurador prácticas de finanzas éticas?

Las compañías de seguros han comenzado recientemente a tener en cuenta consideraciones ESG a la hora de tomar sus decisiones de inversión. El cambio climático ha sido de uno de los temas palanca al tener un impacto directo en sectores económicos estratégicos. Por ejemplo, los riesgos climáticos pueden ir asociados a daños catastróficos, que, en general, están cubiertos por el sector asegurador a través de las distintas pólizas de seguros. También las organizaciones sociales han empezado a demandar a las grandes aseguradoras que no aseguren, por ejemplo, a las grandes centrales de carbón. La reciente creación del Foro para la Transición de Seguros hacia Cero Emisiones Netas (FIT), convocado y liderado por las Naciones Unidas, es un ejemplo de la preocupación de este tema en el sector, no exento de batallas internas.

Pero, más allá de la preocupación medioambiental ¿es posible introducir en el mercado asegurador las prácticas propias de la banca ética en términos de transparencia y equidad? En 2008, el Observatorio de las Finanzas Éticas desarrolló una certificación para el sector asegurador con la idea de poder garantizar unas prácticas éticas, tanto en la gestión de las entidades como en los productos que las compañías ofrecían. «Orientar al mercado asegurador hacia la práctica ética y solidaria significa recuperar los principios del movimiento asegurador, especialmente el de mutualidad. La conciencia mutualista se basa en los vínculos de solidaridad entre las personas, y el sentido original de los seguros es, precisamente, establecer esos vínculos entre los miembros de una comunidad«, indican desde EthSI (Ethical and Solidarity Based Insurance).

 

Este distintivo pone en valor la gestión ética de la organización en lo que se refiere a las inversiones, a la responsabilidad social, así como el fomento de la sostenibilidad social, ambiental y la transparencia. El seguro ético forma parte del sistema de finanzas éticas y para las personas usuarias es importante conocer qué uso hace del dinero el sistema asegurador «Cuando la financiación es ética, las ahorradoras, sean personas o entidades, ejercen el derecho a saber dónde se invierten sus ahorros y, por tanto, las entidades financieras dejan de financiar actividades éticamente reprobables e invierten sólo en proyectos de contenido social y ambiental y, a su vez, facilitan el acceso al crédito a colectivos que tradicionalmente han sido excluidos», indican desde la web de Arç Cooperativa, correduría de seguros especializada en el sector de la economía social y solidaria que, junto a Seryes, ambas con el sello EthSI, crearon el proyecto CAES (Cooperación para el Aseguramiento Ético y Solidario), para el fomento y el desarrollo del seguro ético y solidario en la economía social y solidaria.

Según datos del último Barómetro de las Finanzas Éticas 2023, las entidades acreditadas con el sello gestionaron en 2022 un volumen de primas de más de 1.200 millones de euros.  Por lo que respeta a la mediación de seguros, como es el caso de las corredurías que forman parte de CAES, el Barómetro muestra un crecimiento del volumen de primas intermediadas, que llega hasta los 18 millones de euros, y el de las pólizas gestionadas por corredurías certificadas, que suman más de 27.000.

El total de inversiones realizadas desde el sector del seguro ético se aproxima a los 2.030 millones de euros. Estas inversiones están controladas por las entidades aseguradoras con la supervisión del Observatorio. De este modo, se establecen medidas para evitar la inversión en empresas armamentistas, vinculadas a combustibles fósiles o juegos de azar.

Sector en crecimiento

Actualmente son 10 las entidades registradas con el Sello Europeo EthSI. El objetivo del sector de los seguros éticos es poder cubrir todas las necesidades aseguradoras de las organizaciones de la economía solidaria y el mundo asociativo. Sin embargo, dado que aún no existen suficientes compañías certificadas, a veces desde las corredurías de seguros éticos se trabaja con entidades no certificadas para poder cubrir las necesidades aseguradoras de todas las empresas, entidades y personas.

El sector asegurador ético se encuentra en un momento de crecimiento. En noviembre de este año 2024, Barcelona acogerá el II Foro Internacional de Seguros Éticos. El evento, organizado por el Sello Europeo EthSI, contará con voces destacadas del ámbito profesional y académico a nivel nacional e internacional. Será un espacio de encuentro y reflexión para compartir buenas prácticas, identificar los retos de futuro y valorar las estrategias para avanzar en ellos.